En la mañana se procedió a limpiar el museo nuevamente, barriendo aquí y allá, se realizó la instalación de las lámparas fluorescentes en la parte superior de los nichos, una para los pequeños y dos y tres para los grandes. Se procedió a amarra los cables a la estructura de madera para disimularlos.
Se fijaron puntillas sobre el mueble de estibas y se colgaron las obras. Preparándose todo para la inauguración.
Se distribuyeron volantes, se anunció la hora del museo en los alrededores.
Se distribuyeron las camisetas, y una vez llegada la hora, la gente empezó a entrar y a recorrer el espacio. En su mayoría niños empezaron a saltar y apropiar el espacio, dibujaron, se rieron y hablaron con nosotros.